La Nube Enjaulada está basada en una fotografía de Chema Madoz. En ésta se puede ver una nube en el cielo cubierta con una jaula para pájaros, empleando la perspectiva como aliada para crear la sensación óptica.
Tomando como poética dicha imagen, la obra se articula en torno a las ideas de libertad y aire. Sin tempo estricto, y fundamentada en sonoridades luminosas, la pieza está estructurada mediante el desarrollo de dos objetos sonoros que se contraponen: la idea de lo vertical frente a la horizontalidad, lo férreo frente a lo móvil, lo sólido frente a lo etéreo, el barrote frente a la nube.
Dicho contraste es el hilo argumental de la obra, la cual se va transformando y adquiriendo nuevos ambientes pero sin perder nunca de vista su esencia primaria.